lunes, 6 de diciembre de 2021

Hojas de la memoria: Descubrir y recuperar la Ribera del Marco

El pasado domingo, 28 de noviembre, tuve el privilegio de participar en el evento La Ribera Literaria, organizado por la Biblioteca Pública de Cáceres en colaboración con la Asociación de Amigos de la Ribera del Marco y en el curso del cual se plantaron una treintena de olmos resistentes a la grafiosis en la zona conocida como "Huerta del Conde". Se había convocado a otros tantos escritores y escritoras, que apadrinarían la plantación de cada uno de estos árboles, colocando unas cartelas con el nombre del correspondiente escritor o escritora. 

Actos como este se revelan más que necesarios a fin de dar visibilidad y promover la recuperación efectiva de una zona de Cáceres cuya importancia para la ciudad es indiscutible y que a todos corresponde poner en valor. Destacados intelectuales e industriales cacereños han reivindicado la singularidad de la Ribera del Marco y su enorme potencial tanto hídrico como ecológico desde finales del siglo XIX, aunque no siempre hayan sido escuchados como se merecen. La escritora e investigadora Pilar Bacas, en su libro Joaquín Castel, La burguesía emprendedora en Extremadura (Ateneo de Cáceres/Tau Editores, 2017), recuerda la figura de este farmacéutico aragonés, afincado en Extremadura, redactor de varias monografías con propuestas para la dinamización de los recursos hidrológicos de la ciudad, llamando especialmente la atención acerca del Manantial del Marco y del agua procedente de las Minas de Fosfatos. De su lectura se desprende no solo hasta qué punto Castel se implicó con su ciudad de adopción sino también cómo sus ideas resultaban relevantes y útiles para el aprovechamiento de los acuíferos existentes en los alrededores del casco urbano. En los folletos publicados en la imprenta de Nicolás Jiménez, sita en el Portal Llano, en la Plaza Mayor, entre los años 1895 a 1899, se recogen Algunas ideas sobre el engrandecimiento de Cáceres, tratando de concienciar a los cacereños sobre la Influencia del manantial del Marco en el desarrollo material de Cáceres. No es para menos. 

La importancia de la Ribera ha sido capital en la historia de nuestra población y también hoy, cuando todo lo tecnológico y virtual parece haberse adueñado del día a día, se hace todavía más urgente desplegar cuantas actuaciones sean necesarias para preservar el medio natural, en unos momentos en que los efectos del cambio climático cada vez están más presentes. En Cáceres, esto significa que la ciudad debe volver sus ojos hacia la Ribera. No se puede permitir que un espacio tan singular y dotado de tantos valores ecológicos continúe depreciándose, sucumbiendo víctima del abandono y de la acumulación de basuras y residuos. Basta echar un vistazo a la gran laguna del Marco y a su cauce. A finales del XIX, Joaquín Castel proponía una serie de medidas con las que pretendía dotar de caudal a la cuenca del Marco y utilizarlo para el alumbrado eléctrico de la vía pública de Cáceres, así como para destinarlo al riego de las huertas. En el siglo XXI, ¿a quién no le gustaría que nuestra ciudad dispusiera de un corredor fluvial transitable, un oasis de naturaleza a pocos metros de las edificaciones? Iniciativas como esta de La Ribera Literaria resultan por ello tan necesarias, aunque ciertamente, no son las únicas ni las primeras que pretenden conservar, cuidar y potenciar este espacio verde. Libros como La cacereña Ribera del Marco, de Juan Carlos Martín Borreguero, Fernando Jiménez Berrocal y Agustín Pedro Flores Alcántara (Ayuntamiento de Cáceres, 2008) y campañas como La Ribera del Marco se mueve, Cáceres se mueve, pretenden informar a la ciudadanía sobre la importancia de este corredor, sus elementos naturales, etnográficos y arqueológicos de todo tipo que son parte y vida de la historia de Cáceres. A ello hay que añadir las actividades que viene realizando la Asociación de Amigos de la Ribera del Marco, que como se indica en su página web (https://amigosdelariberadelmarco.jimdofree.comtiene como propósito promover la conservación y descontaminación de la Ribera y de su entorno. A ello contribuirá también el nuevo número de Norbania que acaba de publicar la Asociación Cultural Norbanova. 





Efectuaremos a continuación un recorrido visual por algunos puntos vinculados a la Ribera del Marco, recordando épocas pasadas por medio de antiguas fotografías y tarjetas postales, así como contemplando su estado actual. 


Aguadoras en el Puente de San Francisco, procedentes de Fuente Fría 
(Tarjeta Postal E. Blasco)


Antiguos Pilares de San Francisco, hoy en el Foro de los Balbos (década de 1930)


Vista parcial de la ciudad, en primer plano, a partir de San Francisco, 
aspecto general de la Ribera y sus huertas
(principios de la década de 1960)


Fuente Concejo (1915, fotografía de Xavier Parès)


Vista parcial de la ciudad, en primer plano, huertas y Ribera en la zona de Fuente Concejo 
(mediados del siglo XX. Fotografía de Otto Wunderlich)



Sellos emitidos por la Asociación Cultural Filatélica y Numismática Cacereña dentro de la serie "Cáceres Verde", dedicados a la Ribera del Marco. 





La Ribera del Marco en la actualidad